
Cusco Ciudad
CuscoCusco es una de esas ciudades que dejan huella. No solo por lo que ves, sino por lo que se siente. Hay una energía distinta. Estás caminando entre siglos de historia: desde las bases incas y los templos coloniales hasta los mercados locales y cafés contemporáneos. Es un lugar que te invita a hacer pausas, observar con atención y conectar con su gente.
Si estás pasando unos días en Cusco antes de visitar Machu Picchu, o si la ciudad es tu destino principal, aquí tienes algunas experiencias que vale la pena vivir. Y sí, hacerlo acompañado de personas que conocen bien el lugar marca una gran diferencia.
Comienza explorando a pie
Una excelente manera de empezar a conocer Cusco es caminando. El City Tour a pie te lleva por los puntos más emblemáticos de la ciudad: la Plaza de Armas, Qoricancha y la Catedral, con el acompañamiento de un guía que comparte historias, detalles y datos que quizás pasarían desapercibidos si vas por tu cuenta.
Si deseas ampliar la experiencia, el City Tour con ruinas cercanas incluye visitas a Sacsayhuamán, Q’enqo, Tambomachay y Puka Pukara, sitios arqueológicos ubicados en los alrededores de la ciudad. Son lugares llenos de historia y simbolismo, y recorrerlos con un guía capacitado hace que cada visita tenga mucho más sentido.
Una noche para mirar al cielo
La ubicación de Cusco también es ideal para observar las estrellas. En el Planetario de Cusco, vivirás una experiencia tranquila y enriquecedora donde aprenderás cómo las antiguas civilizaciones andinas comprendían el universo. Conocerás las constelaciones según la cosmovisión inca y, si el cielo está despejado, podrás observarlas con telescopios. Es una actividad que combina ciencia, cultura y un toque de contemplación.
Sabores con identidad
La gastronomía peruana es famosa en todo el mundo, y en Cusco puedes experimentarla de forma directa. Las clases de cocina comienzan con una visita al Mercado de San Pedro, donde elegirás los ingredientes junto a un guía, aprendiendo sobre productos locales y costumbres culinarias. Luego subirás a una cocina en una terraza con vista a la ciudad para preparar un almuerzo o cena tradicional que compartirás con el grupo.
Si lo tuyo es lo dulce, el Taller de Chocolate te permite elaborar tu propia barra de chocolate desde el grano de cacao, usando ingredientes nativos. Y si viajas con niños, el Mini Taller de Chocolate es una opción divertida, corta y pensada para que todos participen.
Crea y llévate algo con significado
En muchos techos de Cusco verás figuras de toritos: son los Toritos de Pucará, símbolos de protección y bienestar. En el Taller de Cerámica "Creando una Leyenda", conocerás el origen de esta tradición y podrás crear tu propio par de figuras guiado por artistas locales. Es una experiencia relajada y creativa, ideal para quienes quieren llevarse un recuerdo hecho con sus propias manos y cargado de historia.
Consejos útiles
- Adáptate al ritmo de la ciudad: Cusco está a más de 3,400 metros sobre el nivel del mar. Es recomendable caminar con calma, mantenerse hidratado y respetar los tiempos del cuerpo.
- Lleva ropa en capas: las mañanas suelen ser frías, el sol de mediodía puede ser intenso y las noches vuelven a ser frescas.
- Aprovecha el conocimiento de tu guía: te ayudará a entender mejor lo que ves, acceder a espacios culturales y resolver cualquier duda durante tu viaje.
Cusco tiene mucho que ofrecer, y recorrerlo con personas locales te abre puertas, te da contexto y hace que tu experiencia sea más auténtica. Ya sea que te interese la historia, la astronomía, la gastronomía o el arte, estas actividades están pensadas para ayudarte a vivir la ciudad desde adentro, con profundidad y confianza.



